Cuáles son las características principales de un prestamista de dinero

A pesar de que el término “prestamista” siempre ha existido, en los últimos años -y coincidiendo con la crisis económica-, se ha convertido en una palabra que aparece con mucha más frecuencia en nuestro día a día. Sin embargo, no siempre tenemos claro su significado y a veces lo confundimos con otros conceptos que se asemejan, pero cuyo significado es diferente, por ejemplo “prestatario”. ¿Qué son, entonces, los prestamistas? ¿Por qué se caracterizan? Y, por último, ¿Qué nos pueden ofrecer?

El prestamista y el prestatario: ¿Qué son?

El diccionario de la Real Academia Española define al prestamista como aquella “persona que presta dinero”. Si desenvolvemos este concepto en términos jurídicos, nos encontramos con que el prestamista es aquella persona –física o jurídica- que facilita el acceso a un préstamo gracias a sus fondos propios o de la entidad en la que se inscribe. A cambio, el prestamista saca beneficio de esta acción a largo plazo, ya que el dinero debe ser devuelto casi siempre con intereses. La persona receptora del dinero se conoce como prestatario y el préstamo es, básicamente, el acuerdo al que llegan ambos.

Por otra parte, existen varias tipologías de prestamistas; los más conocidos: prestamistas bancarios y prestamistas de tipo individual. Los primeros son una figura que identificamos con facilidad. Se trata de entidades bancarias que facilitan una determinada cantidad de dinero a un cliente, siempre y cuando este presente una serie de requisitos que, entre otras cosas, aseguran que el dinero va a ser devuelto o que existe un aval que garantice tal devolución. Los prestamistas de tipo individual no suelen exigir tantas condiciones como las entidades bancarias, pero acostumbran disponer de cantidades de dinero inferiores.

¿Qué caracteriza a un prestamista de tipo individual?

A pesar de que cada préstamo tiene sus particularidades, hay algunas características que encontramos en la mayoría de prestamistas:

• El prestamista emite préstamos de cesión temporal. Si el préstamo no implica que deba ser devuelto en el futuro (con o sin intereses), entonces no se trata de un prestamista.
• Deciden cuando otorgar o no un préstamo: esto significa que la persona que solicita el préstamo no tiene por qué tener un “buen historial financiero”.
• Los términos y condiciones del préstamo pueden ser negociables.
• Algunos aceptan que el prestatario solicite un único crédito para pegar varias deudas.

La devolución del préstamo

Siempre que solicitamos los servicios de un prestamista, vamos a comprometernos a devolver el préstamo. Dicha devolución puede variar en cada caso, pero en general se corresponde con alguno de estos plazos:

• A corto plazo: la devolución se efectúa como máximo en un año. En general se trata de préstamos que implican pequeñas cantidades de dinero, que surgen de problemas leves e inesperados.
• A medio plazo: entre uno y cinco años y suelen utilizarse para costearse por ejemplo una formación académica.
• A largo plazo: la devolución del crédito puede realizarse en más de cinco años. En estos casos el crédito implica cantidades de dinero mayores, que suelen ir destinadas a grandes compras: un coche, una vivienda, etc.