Cien días de Gobierno Populista
Hacer un balance de tan solo cien días de gobierno, es poco tiempo para juzgar, pero algunos síntomas se han podido ver:
1º.- Accedieron al Gobierno Local saltándose su programa, lo que supone un incumplimiento claro del mismo, del cual yo personalmente me alegro, pues lo que había era impresentable.
2º.- Cedieron a la presión del mundo taurino, lo que supuso otro incumplimiento, también me alegro, pues es conveniente escuchar, acordar y prohibir lo estrictamente necesario.
3º.- El reparto de sueldos en la corporación fue un acuerdo impresentable y que tampoco lo recogía el espíritu de su programa.
4º.- Los cambios del IBI, no estaban justificados y los argumentos tanto de Ganemos como del PSOE no se sostenían, los equilibrios presupuestarios se pueden realizar de distintas maneras y una vez más no se pensó en los bolsillos de los más débiles.
Concretamente hoy he recibido una carta del catastro donde me indica lo que pagaré en 2016 y es exactamente igual a 2015, por tanto eso que llaman bajada, no es tal.
Todo esto ocurre cuando se hacen programas para no gobernar y se pretende agradar a todos y este es el caso, jamás pensaron que podían acceder a la Alcaldía, que no a ser Alcalde, que eso solo lo es el que gana las elecciones, todo lo demás son acuerdos legales, pero de dudosa legitimidad.
Pero lo peor que he visto en estos cien días ha sido la manera de dirigir los plenos, es de vergüenza ajena ver como se hablan entre ellos y como se dirigen desde sus sillones a los ciudadanos, el respeto brilla por su ausencia.
En cualquier caso, era el resultado menos malo, porque lo que hay enfrente es horroroso, una ex Alcaldesa que huye, una Rosa Ganso que dice muchas tonterías, (nada nuevo, siempre las dijo), un Madera que no se va ni con agua hirviendo, (ya lleva 20 años, más otros tantos en Getafe), y un PSOE que prescinde de una concejala, aparentemente con ideas frescas y de clara valía, solamente para resolver sus problemas económico-personales.
Que sigan trabajando y más adelante les iremos juzgando.
ANTONIO FERNANDEZ GONZALEZ