La Epa no es la Pepa

Hace 200 años, los liberales españoles al grito de ¡Viva la Pepa! celebraban la constitución de 1812. Aquella proclama, con la que los gaditanos salían a la calle y festejaban la consecución de unos derechos, en mi opinión ha sido muy sobrevalorada (donde por ejemplo la mujer no adquiere ninguno y el texto sacraliza a España como un Estado confesional católico prohibiendo otra clase de religión).

203 años después, los neoliberales españoles tanto a nivel nacional, como autonómico y local gritan ¡Viva la EPA! aunque evidentemente ni tienen la gracia andaluza ni la realidad de los datos de la encuesta de población activa son para tirar cohetes.

Quizá como en 1812, tratan de hacernos ver que un exiguo avance en las condiciones de los ciudadanos es un paso de gigante para superar esta grave crisis en la que estamos sumidos. Pero siendo objetivos, estamos muy lejos de esa realidad y lo vamos a ver con datos:

El crecimiento anual en materia de empleo es de un 1,2%, este dato tan positivo significa que creciendo a este ritmo serían necesarios 16 años (2030) para llegar a los datos de 2008.
A pesar del ligero incremento de 2014, hay 1.077.225 personas menos con empleo que en 2011 cuando el Partido Popular llegó al gobierno y se autodenominó como el salvador de la Patria (18.421.400 ocupados en 2011 por 17.344.175 en 2014).
En comparación con 2011, el número de asalariados con jornada completa cayó en 1.355.700 personas, mientras que el número de los que trabajan a tiempo parcial aumentó en 249.125. Dato que indica que la precariedad laboral ha sido la vía elegida por el Gobierno para salir de la crisis.
Estamos en un proceso de reparto del tiempo de trabajo donde, más que aumentar el empleo asalariado, se reparten las horas de trabajo:

Trabajan más personas pero menos horas y con menos salarios y derechos. Si en 2008 el empleo a tiempo parcial no llegaba al 12 % del total, en 2014 ya supera el 17 % siendo sangrante en el caso de las mujeres que asciende a un 27%.

En 2014 la población activa volvió a caer en 235.525 personas, acumulando ya una pérdida de activos próxima al medio millón desde 2011. Como el paro bajó en 440.700 personas y los activos en esas 235.525 personas, en 2014, el 53 % de la reducción del desempleo, más de la mitad, se explica porque la gente deja de buscar trabajo o emigra en búsqueda de oportunidades fuera de nuestro país.
En 2014, más de 3,4 millones de personas en paro, el 62 % del total, son desempleadas de larga duración porque llevan más de un año buscando empleo. Y de ellos, más de 2,4 millones son parados de muy larga duración porque llevan más de dos años en esa situación.
El Drama del paro acerca a muchas personas al borde del abismo, de la exclusión social, de quedar fuera tanto del mercado de trabajo como de los sistemas de protección social. Una situación de emergencia que en parte ya viven los casi 750.000 hogares que, de media en 2014, no perciben ningún tipo de ingreso laboral, ni salario, pensión, prestación o subsidio por desempleo. A esto Marx (Karl, no Groucho) lo llamó lumpemproletariado .
España, junto con Grecia, es el país que más empleo ha destruido en esta crisis. Una tasa de paro que duplica la media de la UE, que multiplica por cinco la de Alemania y que nos convierte en el país europeo con un mayor número de personas sin empleo en cifras absolutas, a pesar de las diferencias de tamaño en términos de población, y porcentualmente.
51,8% De paro juvenil con todo lo que ello conlleva.

Esto son sólo datos fríos, la realidad es mucho más dramática, no sólo para aquellos que no encuentran trabajo sino también para aquellos que aún trabajando, viven en el umbral de la pobreza. Los desahucios siguen estando a la orden del día y el gobierno en vez de poner medidas para evitarlo, elabora leyes como la ley mordaza para disuadir a los ciudadanos a base de multas e impedir que podamos defendernos entre nosotros mismos.

Quien suscribe, ni es un afamado economista, ni sociólogo, ni antropólogo, ni abogado. Soy un obrero, orgulloso de serlo, que hace tiempo ya avisó de la sistemática estrategia que el gobierno del Partido Popular en materia de empleo ha llevado a cabo, es decir:

– Una primera fase donde la reforma laboral elimina de un plumazo la negociación colectiva, devalúa los salarios, abarata los despidos, y da vía libre a las empresas e instituciones públicas para ejecutar ERES extintivos sin tener que pasar por los juzgados (aprovecho este punto para dar mi apoyo a los trabajadores de Coca-Cola y a los 4 DespedidosporPPinto, por su inagotable y elogiable lucha. Son claros ejemplos de lo que anteriormente explicaba).

– Y una segunda fase, que coincide con el momento actual, donde en un año electoral tratarán de poner toda su maquinaria mediática y meternos por los ojos cifras de crecimiento del empleo, aunque eso sí, omitirán decirnos que esta recuperación se liga al empleo temporal con menores salarios y menos derechos.

Termino como empecé, dícese de la expresión ¡Viva la Pepa! que es un sinónimo de desorden o vagancia y que equivale a alguien irresponsable o despreocupado. A mí me gustaría añadir, dícese de aquellos expertos en la precarización, privatización, humillación, corrupción, manipulación, absolutismo, fundamentalismo, capitalismo y un largo etc… así que termino parafraseando a nuestra querida Alcaldesa, PORQUE LO DIGO YO!!! ¡Viva la EPA!