La prevención de la violencia de género no es solo para las mamás
“Niños y niñas de 4 a 10 años y sus mamás”. Así llama a la participación el cartel del taller Educar en Igualdad para evitar la Violencia de género, que organiza el Ayuntamiento de Pinto durante este octubre y los próximos meses. Una iniciativa necesaria, la de formar en igualdad, pero cuya convocatoria me inquietó. ¿Solo para madres? ¿Qué pasa con los padres, que no va con ellos la educación de sus hijos y la de sí mismos? La medida se queda a medio camino en la búsqueda de soluciones e, incluso, puede arraigar algunos estereotipos de género nada saludables.
La educación es uno de los principales pasos que nos separan de la igualdad de género, según señalan las especialistas en violencia machista, y por eso agradecí la inversión pública en un taller de este tipo. Que las mujeres conozcan las líneas rojas de un trato discriminatorio (y no digamos ya violento) es fundamental para que puedan reaccionar a los primeros indicios de maltrato. Pero, sin duda, tan importante o más es enseñar a los hombre a no pegar, insultar y discriminar.
Es importante recordar que los agentes, aquellos responsables del maltrato, son ellos y no ellas. Por lo tanto, la deficiencia de valores igualitarios en los agresores merece aún más estos talleres formativos. No entiendo ningún motivo por el que los hombres –no me refiero solo los agresores– no estén invitados a estos cursillos porque son una pieza más, indispensable en la educación de los hijos. O deberían serlo.
Porque a lo mejor, de manera inconsciente (quiero creer que no es la intención del curso), estamos diciendo que la educación de los niños es solo una tarea de las madres. Y ahí caemos en una trampa con raíces profundas que están lejos de la igualdad que pretendemos instaurar. Aquellos estereotipos de género que hacen menos visible la discriminación. Porque reconocer hoy en día maltrato en una agresión física a una mujer es fácil. Restringir sus oportunidades laborales con responsabilidades como buscar a los pequeños al colegio, ayudarles con los deberes o llevarlos al médico, cuando se asume que es tarea exclusiva de ellas, cuesta más de identificar.
Imagino que el taller ayudará a los asistentes a abrir sus horizontes y cuestionar sus valores. Que los niños recibirán lecciones de cómo tratar a las niñas que se sientan a su lado. Y lo mismo para ellas. Pero no puedo dejar de sentir que nos quedamos a medio camino. Que podríamos hacer más o, por lo menos, exigir más. Las reglas del taller no están en la mano de la población de Pinto, pero cuestionarlas e intentar cambiarlas sí.
Les invito a leer los contenidos del taller, que se imparte en el Centro Rosario de Acuña, para que reflexionen cuáles creen que son exclusivos para mujeres: “Conocimiento del grupo, construcción de la autoestima, entrenamiento emocional, control de estrés, habilidades sociales, habilidades de comunicación, promoción de la salud, relaciones interpersonales, igualdad de Oportunidades, resolución de conflictos y ocio y tiempo libre saludable”. Pues eso.
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3 Comments
Los comentarios contra los padres perjudican a los hijos ; y el no incluirlos en los talleres de cualquier tema famililiar o educacional a quien les acaba perjudicando es a ellos . Si así se hace , se sigue fomentando el sexismo y hay que normalizar que tanto padres cómo madres pueden hacerlo todo de forma indistinta .
Es cierto qué hay mucha mayor violencia hacia las mujeres aunque no olvidemos, y por pocos casos qué sean, a veces es al revés y en estas circunstancias ¿Quien enseña qué a los hijos? .
Yo sufrí la agresividad de la qué fué mí mujer y ahora ¿Debo dejar la enseñanza sobre el respeto y la no violencia a ella?.
Los políticos deben pensar en todos mujeres y hombres (todos personas) y se fomenta la igualdad no poniendo sólo para mamás en el taller ; pues algunos hombres tenemos claro lo qué es violencia y la maldad de muchos de nuestros congéneres nos perjudica a nosotros .
Y de nuevo para los políticos …. la conciliación es una cosa de todos basta ya de horarios interminables (nuestros hijos necesitan de un padre y una madre).
Tras leer el artículo anterior, sobre el “Taller para la prevención…” y manifestar mi acuerdo con lo que en él expone tan acertadamente la periodista, no puedo sino recordar mis años de infancia, con la presencia invasiva de la Sección Femenina en todos los ámbitos de la vida de las mujeres españolas de los años cincuenta y sesenta.
Todo para el hombre: las mujeres, a su servicio.
Ignoro de dónde salió la idea de este taller “para mamás” pero nombrarlo de ese modo, es ya un insulto para las mujeres en general, para las maltratadas en particular,para los niños y niñas que acudan a él y vean que sus padres no están presentes…
En fin, ese taller está mal concebido; pierde su improbable sentido solo con leer el nombre que le han puesto.
Araceli Mancheño
Opiniones…hay muchas…pero la tuya dudo que sea desde la realidad de una vida marcada por la angustia, los insultos y la soledad como ha sido la mia. Soy una mujer que ha sufrido todo tipo de vejaciones delante de sus dos hijos..uno de ellos ya es mayor y gracias a Dios no sigue los pasos de su padre pero el pequeño ha vivido situaciones tan desagradables que hoy asiste a la Psicologa infantil. En este curso somos muchas las que vamos para arreglar los destrozos quw en nuestros hijos ha hecho vivir ese infierno…y no…no vienen los padres porque somos victimas…y ellos no quieren saber nada..y mejor lejos muy lejos el año pasado ya fui a la terapia del ayuntamiento pero este año voy con mi hijo..padres? No se de momento lo que veo es a alguna mujer que como yo ha vivido cosas muy malas y es terapia para nosotras..mamas? Claro no van a venir los sinvergüenzas..y me parece bien qie vengan mas mamas que no esten dentro de terapia…sus hijos les vendra bien aprender a respetar te pediria que antes de opinar te informases…la opinion es muy libre pero nosotras no y estos comentarios pueden hacer que los politicos no hagas mas cosas de estas que tanta falta nos hace…