La Casa de Pinto, una asociación de todos y para todos

El pasado mes de octubre la asociación La Casa de Pinto renacía con el ambicioso fin de recuperar el patrimonio Pinteño: cultura, costumbres, gastronomía, música, artesanía o agricultura, entre otras.

La Casa de Pinto nació al rededor del año 2006. La idea y fundación fue de algunos antiguos compañeros y amigos que decidieron unirse para poner en marcha diferentes proyectos. Después de unos pocos años la idea se aparcó y ha permanecido dormida.

“Hoy hemos considerado que este proyecto está mas justificado que nunca anta le falta de valores de todo tipo que acechan a nuestra sociedad y por otro lado será una plataforma de sinergias para reactivar la economía. (Miguel Jiménez-presidente)”

¿Cuales son los fines de la asociación La Casa de Pinto?.- La respuesta a esta pregunta hay que dividirla en dos partes, nos cuenta su presidente. En sus inicios, La Casa de Pinto pretendía ser solamente una casa regional para conservar la cultura y tradiciones de Pinto, de Madrid y de la zona de La Sagra donde pertenecía Pinto hasta hace pocos siglos. Pero hoy le hemos querido dar otro fin adicional para hacer de la casa de Pinto una casa para todos los vecinos vengan de donde vengan; una casa donde se de respuesta a las inquietudes, necesidades, problemas de nuestra comunidad, una casa que sirva de motor económico donde todos nos beneficiemos, en definitiva: una Casa de Pinto para beneficio de todos los pinteños.

La recuperación del patrimonio pinteño es, para esa asociación, el motor de sus actividades. Para lograr este fin tan ambicioso, la Asociación La Casa de Pinto se ha marcado como hito primordial, conseguir la construcción de un edificio-sede que albergue todas las actividades necesarias para conseguir el fin asociativo de sus estatutos: Salón de actos, oficina administrativa, talleres escuela, museo etnográfico, archivo audiovisual (TV), bar, etc.
“Estamos acostumbrados a convivir con las casas regionales que fueron creadas para conservar las tradiciones de las regiones de donde proceden los emigrantes que desde otras zonas de España vinieron a nuestra región buscando una vida mejor. De una manera o de otra, estas “casas” han sido financiadas en gran parte con fondos municipales, cosa que no nos parece mal; es por esto que demandamos, con esta misma esta misma regla, se aplique a conservar las costumbres de esta región tan mal tratada en este sentido ya que por culpa de nuestra indiscutible hospitalidad nos hemos ido adaptando a otras costumbres mientras hemos olvidado las nuestras”